Cuando empecé con mi trabajo tuper sex nunca pensé que iba a durar tanto. Al principio, lo hice para ganarme un poquito de dinero y compaginarlo con mis estudios de psicología. Estoy estudiando fuera de casa y era un esfuerzo bastante grande, económicamente hablando, para mis padres. Así que un poco por casualidad, empecé con ese trabajo tuper sex. Es que tenía una compañera de facultad que lo hacía y cuando vi cuánto ganaba, me apunté a ello yo también.
Era muy cómodo también porque podía compaginar fácilmente estudios y trabajo. Eso es una gran ventaja cuando se pasan tantas horas estudiando. Es muy importante poder organizar su tiempo como mejor le viene a uno. Así que al principio no fue por vocación pero sobre todo por por ganar dinero y poder ayudar a mis padres. Aunque ellos, en un primer momento, y sobre todo mi padre, no querían que lo hiciera por si no tenía tiempo para mis estudios.
Pero poco a poco siempre me estaba gustando cada vez más mi trabajo tuper sex. Me permite conocer a gente de todo tipo, tanto de estatus social como de orientación sexual muy diferente. Es muy enriquecedor y aporta mucho a nivel personal también.